El nacimiento de la primera fábrica de tapices en España data de 1721. Cuando Felipe IV encarga al súbdito belga Jacobo Vandergotten la
creación de la misma.
La fábrica de Miguel Stuyck, descendiente de Jacobo Vandergotten, tras diez generaciones dedicadas a la fabricación de alfombras y tapices puede considerarse como una de las más importantes del
mundo, ya que han salido y continúan saliendo verdaderas obras de arte, que han embellecido los mejores palacios, hoteles de gran lujo, bancos, organismos oficiales….
El adquirir algunos de sus productos, produce la satisfacción de poseer una auténtica «obra de arte », con la garantía que ofrecen sus materias primas de primera calidad, unidos siempre a la
clásica belleza de sus dibujos, diseños y coloridos.